ODS 2: Hambre cero. ¿Qué puede hacer la ciudadanía?

El segundo Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas, «Hambre cero», es una meta que busca erradicar el hambre, lograr la seguridad alimentaria, mejorar la nutrición y promover la agricultura sostenible.

Conoce en qué consiste exactamente este objetivo, por qué es crucial y qué acciones concretas puedes llevar a cabo, como ciudadana/o, para contribuir a su cumplimiento.

El ODS 2: Hambre cero

Esta segunda meta se centra en poner fin al hambre, en todas sus formas y para todas las personas.

La alimentación es un derecho humano fundamental y este objetivo tiene como finalidad asegurar que nadie pase hambre y todos tengan acceso a alimentos seguros, nutritivos y suficientes. Para lograrlo, es necesario abordar una serie de desafíos, desde la escasez de alimentos hasta el acceso limitado a recursos agrícolas.

La realidad del hambre

A pesar de los avances significativos en las últimas décadas, el hambre sigue siendo una realidad para millones de personas en todo el mundo.

Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), en 2020, aproximadamente el 9,9 % de la población mundial, es decir, cerca de 768 millones de personas, sufrieron las consecuencias de la hambruna. Esto representa un aumento respecto a años anteriores, agravado por la pandemia de la COVID-19.

¿Por qué es importante el ODS 2?

Este ODS resulta clave porque trata de dar solución a varios problemas. En primer lugar, el acceso a alimentos nutritivos es un derecho humano fundamental y la necesidad de comer representa una violación de estos derechos básicos.
Por otra parte, el hambre es un obstáculo para el desarrollo de la sostenibilidad; pues, sin una nutrición adecuada, las personas no pueden alcanzar su pleno potencial ni contribuir al progreso de sus comunidades.

A su vez, la falta de acceso a alimentos adecuados perpetúa el ciclo de la pobreza y la desigualdad. Abordar este problema es esencial para reducir la brecha entre ricos y pobres.
Por último, la desnutrición por falta de ingesta de comida tiene un impacto devastador en la salud de las personas (especialmente, en los niños). Esto aumenta la carga de enfermedades y la mortalidad infantil.

Acciones para cumplir el ODS 2

La erradicación del hambre es una tarea global que requiere esfuerzos de todos los segmentos de la sociedad y tú, como ciudadana/o, juegas un papel central en este esfuerzo.
Te presentamos acciones que puedes efectuar para contribuir al cumplimiento de este objetivo.

A nivel individual

Te aconsejamos que evites el desperdicio de alimentos en casa y compres de manera consciente.
Adquiere productos alimentarios locales y apoya a los agricultores de tu zona. Esto contribuye a la seguridad alimentaria y fomenta la economía local.

También puedes aportar alimentos o tiempo, como voluntario, en bancos de alimentos y organizaciones que luchan contra el hambre.

​A nivel comunitario

Puedes promover programas de educación nutricional en escuelas y comunidades para concienciar sobre la importancia de una dieta equilibrada.
Igualmente, es una gran idea fomentar la creación de grupos de intercambio de alimentos en la comunidad para que las personas compartan alimentos y recursos.
Por otra parte, puedes participar en proyectos de huertos comunitarios que proporcionen alimentos frescos a quienes más los necesitan.

En conclusión, dentro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, el ODS 2 supone un compromiso global para eliminar el hambre y promover la seguridad alimentaria.
Esperamos que, con las ideas propuestas, tanto a nivel individual como colectivo, desempeñes un papel determinante en la consecución de este objetivo.
No olvides que cada paso que damos para reducir el hambre nos acerca, un poco más, a un mundo en el que todas las personas tengamos las mismas oportunidades alimentarias.