El futuro de las ciudades se configura como un escenario dinámico y transformador, moldeado por una amalgama de innovaciones tecnológicas, cambios demográficos y medioambientales.
En este contexto, la tecnología desempeña un papel crucial. La implementación de ciudades inteligentes, impulsadas por la conectividad y el análisis de datos, promete mejorar la eficiencia de los servicios urbanos, desde el transporte hasta la gestión de residuos. La movilidad sostenible y las energías renovables se perfilan como elementos clave para abordar la huella ecológica de las ciudades, buscando un equilibrio entre el desarrollo y la preservación del medio ambiente.
La pandemia global también ha dejado una marca indeleble en la concepción de las ciudades del futuro. La flexibilidad en el trabajo, la aceleración de la digitalización y una mayor conciencia sobre la importancia de espacios verdes y al aire libre están redefiniendo las prioridades urbanas. La resiliencia se erige como un principio fundamental, no solo en términos de salud pública, sino también en la capacidad de las ciudades para enfrentar desafíos climáticos, económicos y sociales.
¿Qué elementos nos gustaría encontrar en las calles del futuro? ¿Estamos dispuestos/as a sacrificar privacidad a cambio de seguridad? ¿En qué medida apoyamos la creación de ciudades abiertas y diversas?
Este estudio trata de responder a estas y otras preguntas, analizando las opiniones y expectativas de la ciudadanía sobre los cambios que traerá el futuro de las ciudades.